Embalados

Los rossoneri sumaron su quinta victoria consecutiva de forma apretada y se afianzan en el camino a la liguilla por el título del torneo.

Con el uniforme blanco y con ausencias importantes al inicio del encuentro, el Milan encaraba su compromiso contra uno de los equipos de recién ingreso al torneo. El inicio fue complicado y con cierto desorden, ningún equipo se acomodó en la cancha hasta pasados los diez minutos del primer lapso, cuando los lombardos lograron culminar una buena jugada colectiva y Aldo Bertoni se encargó de poner número a los cartones; sin embargo, en una descolgada del rival, un autogol igualaría el marcador antes de conluir la primera mitad.

 

En la segunda parte, ya con el cuadro rossoneri ya completo, nuevamente la acumulación de faltas pondría al Milan contra la pared a falta de doce minutos por jugarse. En este escenario, los lombardos apelaron a los disparos de media distancia, jugadas a balón parado y buenas combinaciones al frente; siendo una de ellas, elaborada por Rubén Manzano y culminada de forma inmejorable por el goleador rossoneri Jair Mondragón para empatar el encuentro. Pero aún faltaba algo... ya que, a falta de 3 minutos del silbatazo final, Antonino Bertoni daría definitivamente los tres puntos al Milan debido a un gran testarazo derivado de un tiro de esquina cobrado por Esteban Rodríguez.

 

Así pues... con catorce puntos consecutivos, los rossoneri se preparan para el último tercio del torneo a fin de cerrar a tambor batiente, mejorando su posición en la tabla y sobre todo, encontrando su mejor futbol!

 

¡¡¡Vamos Milan... a seguir subiendo como la espuma!!!